El cuidado de la piel atópica en invierno

  • 2 de Marzo del 2017
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La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que afecta al 20% de los niños y al 2-3% de los adultos.  Se caracteriza por sequedad, inflamación, enrojecimiento, descamación, picor, etc. Estos síntomas pueden llegar a afectar a la calidad de vida de las personas que lo padecen, ocasionado dificultad para dormir, cambios de humor, cansancio, etc.

Está demostrado que el clima frío y seco aumenta los brotes y agudiza los síntomas de la dermatitis atópica.

Por eso en los meses de invierno se deben extremar los cuidados de la piel:

  1. Aplique cremas hidratantes. La hidratación de la piel debe de ser constante, durante todo el año, sin esperar a la aparición de lesiones o picor. El momento más adecuado para aplicar la crema hidratante es inmediatamente después del baño o ducha, cuando la piel todavía está húmeda. Se debe aplicar por todo el cuerpo. Se prefieren cremas que aceites.
     
  2. Utilice humidificadores ambientales.  La sequedad del ambiente producida por las calefacciones seca más la piel e incrementa el picor. Puede evitarse colocando recipientes con agua o aparatos de humidificación en los hogares.
     
  3. Elija ropa de algodón o lino. Evite el contacto directo de la piel con tejidos como: lana, fibras sintéticas, plásticos, gomas, etc. ya que incrementan la temperatura corporal y acentúan el picor.  No use suavizantes y lejías para lavar la ropa.
     
  4. El calzado debe ser de piel o tela, con buena aireación. Se aconseja el uso de calcetines de algodón o hilo.
     
  5. No abrigue en exceso. En invierno se tiende a poner demasiada ropa  a los niños, pero el sudor y calor excesivo puede empeorar la dermatitis atópica.  Se recomienda usar varias capas de ropa para adaptarse correctamente a cada ambiente. 

 

Fuente: Dra. María Sanz Almazán, médico de familia en el Centro de Salud Riaza (Segovia).

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