Fruta lavada o pelada

  • 4 de Agosto del 2015
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Parte de las vitaminas y las fibras de la fruta se acumula en su piel. Por eso, es recomendable comerse con piel aquellas en las que la piel es comestible; eso sí, antes de consumirla hay que lavarla adecuadamente para eliminar cualquier microorganismo o restos de plaguicidas que se pueden haber quedado adheridos a ella.

Beneficios de la piel de las frutas

Las frutas son una de las mayores fuentes de vitaminas y fibra de nuestra alimentación, por eso se recomienda comer como mínimo 3 piezas al día para asegurar una dieta sana y equilibrada.

Algunas frutas, como las naranjas o los plátanos, no hay más remedio que pelarlos. Pero otras muchas se pueden comer con piel y muchos padres se preguntan si es mejor darles a sus hijos las frutas con piel o sin ella.

Para responder a esta pregunta hay que tener en cuenta que en la piel se concentran parte de la fibra y las vitaminas. Al pelar la fruta, desaprovechamos entre un 10 y un 40% de fibra, dependiendo del tipo de fruta. En cuanto a las vitaminas, en algunos casos la piel puede llegar a tener hasta 4 veces más vitaminas que la pulpa.

Por eso es conveniente comer la piel siempre que se pueda. Sin embargo, debemos tener en cuenta que es necesario lavarla adecuadamente ya que también es cierto que la piel acumula restos de plaguicidas y puede contener microorganismos, parásitos…

Asimismo, no se recomienda dar a los bebés frutas con piel hasta los 18 meses. Los primeros purés de frutas es mejor hacerlos siempre con fruta pelada.

¿Cómo lavar las frutas?

  •  Primero lávate las manos.
  • Lávalas justo antes de consumirlas.
  • Ponlas bajo un chorro de agua y sécalas después con un papel o paño limpio.
  • Si están muy sucias, o en periodos como el embarazo, conviene lavarlas con desinfectantes de uso alimentario para eliminar todos los residuos.
  • Una alternativa es optar por productos ecológicos, en los que se intenta erradicar totalmente el uso de plaguicidas químicos.

En resumen, a partir de los 18 meses es conveniente que tu bebé se acostumbre a comer algunas frutas con piel ya que ésta contiene fibra y vitaminas, pero asegúrate de lavarla correctamente antes de su consumo.