Cómo hacer un árbol genealógico para niños

A veces es complicado que el niño entienda bien los lazos de parentesco que unen a cada miembro de la familia. Una buena manera de ayudarle es elaborando un árbol genealógico juntos, una manualidad divertida, sencilla y muy educativa.

A partir de los 3 años es conveniente que el niño comience a entender quién es quién en su familia, así como las relaciones entre cada miembro, empezando por las más sencillas como padres, abuelos, tíos, primos… Aunque no será hasta los siete años más o menos cuando tenga las habilidades lógicas para entender bien estas relaciones.

No obstante, es importante que el niño conozca desde pequeño sus raíces y su familia, y una manera sencilla y muy gráfica de enseñarle es mediante un árbol genealógico, que no es otra cosa que una representación gráfica y organizada de las relaciones parentales que unen a los miembros de una misma familia.

Además, es una manualidad muy entretenida que conseguirá que paséis una divertida tarde en familia haciendo algo diferente y enseñando al niño nuevos conocimientos e historias acerca de su historia familiar, la historia del país, cultura, etc.

Para hacer un árbol genealógico con tu hijo necesitas lo siguiente: 1 cartulina grande del color que prefiráis, cartulinas A4 de varios colores, lápices o rotuladores y las fotos de los miembros de la familia que queráis que aparezcan en el árbol.

Después, solo tienes que seguir estos pasos:

1. Dibuja el tronco del árbol en la cartulina con dos ramas grandes principales donde situaréis a los 4 abuelos del niño.
2. Después, ve haciendo ramificaciones según los hijos de cada pareja.
3. Una vez tengáis todas las ramas, dibujad hojas grandes para colocar dentro las fotos. También podéis dibujarlos.
4. Decora todo el dibujo con libertad e imaginación.
5. Una vez hecho, explícale bien lo que significa cada rama y la relación entre cada una de las fotos o caritas que aparecen en el árbol.
6. Podéis enseñárselo a los abuelos y aprovechar para que os cuenten historias de su pasado, siempre muy educativo para los niños.

Fuente:

- “Los lazos de parentesco”, Revista online Mi Pediatra, http://revistamipediatra.es/articulo/263/los-lazos-de-parentesco