Síndrome del príncipe destronado

  • 26 de Agosto del 2015
  • 2 min de lectura

Es una reacción negativa y exagerada de animadversión hacia el nuevo hermanito o sus papás que padecen algunos niños cuando nace su nuevo hermano. Estos celos excesivos pueden atenuarse siguiendo una serie de consejos.

Únete al Club familias Únete al Club familias

Casi todos los niños sienten algo de celos cuando nacen sus hermanos, especialmente si se trata del primogénito que hasta ese momento era el hijo único. Los celos dependen de la edad del niño, de la personalidad del mismo, de sus necesidades… pero en algunos casos esta envidia hacia el nuevo hermano es tan grande que puede dar lugar a reacciones excesivas de animadversión hacia el hermanito o hacia vosotros mismos que se manifiestan de muy diversos modos:

  • Problemas de alimentación
  • Terrores nocturnos
  • Comportamiento regresivo
  • Desinterés hacia el nuevo hermano y la familia
  • Hostilidad y agresividad

El niño siente que ya no es el centro de atención, lo que le hace pensar que sus padres ya no le quieren y que su hermano le ha “destronado”.

Es una fase habitual en muchos niños que se acaba pasando, pero es conveniente que adoptéis una serie de consejos para facilitar la convivencia familiar y lograr que el niño acepte al nuevo hermano:

  • Prepara a tu hijo mayor para la llegada de su hermano desde el embarazo. Háblale de lo que está pasando en tu interior, de cómo va creciendo, enséñale las ecografías… Así sentirá que forma parte del proceso.
  • Involúcrale en todo lo que sea posible de los preparativos: elegir el nombre, el color de la habitación, la ropita, etc.
  • Cuando nazca el bebé y vaya a conocerle, asegúrate de tener una foto suya en la mesilla del hospital, así verá que sigues pendiente de él.
  • Cuéntale las ventajas de ser el hermano mayor.
  • Saca todo el tiempo que puedas para estar con él. Tiempo de calidad, haciendo cosas que le gusten, y si puede ser algunos ratos los dos solos, mejor.
  • Respeta sus pertenencias, no le obligues a cederle todo al nuevo.
  • Realiza actividades con los dos juntos: bañarlos, contarles cuentos, jugar, etc.
  • Deja que juegue con su hermano y le coja, siempre que sea posible y estando cerca tú por si pasa algo.
  • Nunca los compares.
  • Y sobre todo ten paciencia, es una etapa que pasa, aunque a veces tarde tiempo.

¿Te ha gustado este contenido?

Deja un comentario

Para poder comentar accede a tu cuenta. Si aún no formas parte del Club familias, únete.

Este sitio utiliza cookies propias y de terceros. Algunas de las cookies son necesarias para navegar. A su vez, nosotros y nuestros socios utilizamos cookies con fines analíticos y de medición del uso de nuestra web, que nos permite almacenar, acceder y procesar datos personales como su visita en este sitio web.

Para habilitar o limitar categorías de cookies accesorias,  haz click en Personalizar la configuración y para obtener más información accede a nuestra Política de Cookies.