Es normal sentir miedo antes ciertas situaciones o experiencias en la vida. Todos, también los adultos, sienten miedo, por lo que es normal que los niños también experimenten miedo en algunas ocasiones, miedos que suelen ir variando a lo largo de los años.
Todos los niños, en su desarrollo psicológico, atraviesan una serie de etapas en las que siente miedo ante determinadas situaciones u actividades. Lo normal es que la mayoría de estos miedos desaparezcan al crecer. Si no es así y se convierten en una fobia, hay que buscar ayuda profesional para tratarlos.
Los principales miedos en los niños son:
- De 0 a 6 meses: miedo ante los ruidos fuertes y bruscos.
- En torno a los 6 meses sienten miedo ante movimientos repentinos
- Hacia los 8 meses aparece lo que se conoce como angustia del octavo mes, que se caracteriza por tener miedo a las personas desconocidas.
- Hacia los 2 años: miedo al médico (sobre todo a las inyecciones) y a dormir solo.
- Hacia los 3 años: miedo a la oscuridad, a los seres imaginarios, a la mayoría de animales, a los insectos.
- Hacia los 7 años surgen miedos más existenciales: a la muerte, a la enfermedad, a que sus padres desaparezcan, etc.
¿Miedo o fobia?
Lo normal es que estos miedos desaparezcan con el desarrollo y crecimiento del niño, pero a veces pueden convertirse en fobias, es decir, en un miedo irracional y exagerado que es persistente, no cede al desarrollo y altera la vida social del niño, causándole un gran sufrimiento.
Una fobia provoca una serie de síntomas reconocibles:
- Sudoración excesiva.
- Aumento de la frecuencia cardiaca.
- Temblores.
- Problemas para respirar.
- Sensación de opresión en el pecho.
- Malestar estomacal.
- Escalofríos.
- Aturdimiento.
¿Qué hacer?
Las etapas normales de miedo hacia algo no se deben ignorar ni ridiculizar, pero tampoco darles demasiada importancia o el niño pensará que el peligro es real.
Lo importante es escucharle, transmitirle tranquilidad y explicarle que eso que le da miedo, la oscuridad, un animal, ir al médico, no es un peligro real, no le va a hacer daño.
También hay que ser paciente y no obligarle a enfrentarse a su miedo solo. Debes transmitirle confianza en sí mismo y en su capacidad para enfrentarse a las cosas.
Podéis leer cuentos o ver películas en los que se trate el tema para que vea cómo los niños de las historias superan sus miedos.
Sin embargo, si estamos hablando de una fobia será necesario acudir a un psicólogo especializado para que le ayude a superar sus miedos.
Etapa vital