¿Cómo preparar una deliciosa papilla de frutas?

  • 5 de Noviembre del 2020
  • 4 min de lectura

La fruta es uno de los primeros alimentos que se introducen en la dieta de un bebé. Su fácil digestión, su sabor dulce y su alto contenido en vitaminas, minerales, agua y fibra hacen de ellas un grupo de alimentos muy saludable. Aprovecha todos sus nutrientes mediante una excelente papilla de frutas. Te detallamos todo lo que necesitas saber:

¿Cuándo preparar la primera papilla de frutas?

En torno a los 6 meses de edad, el pediatra te aconsejará empezar a dar las primeras frutas a tu bebé. ¿Por cuáles empezamos? Las manzanas, las peras y el plátano son buenas opciones para el inicio de la diversificación de su dieta. 

Asimismo, puedes añadir también zumo de naranja o mandarina. Eso sí, siempre sin azúcar y asegurándote de que las frutas no son demasiado ácidas, sino dulces. Si aún así tu pequeño/a lo rechaza, no te preocupes, cíñete entonces tan solo al puré, ¡y ya llegará el momento de los zumos más adelante!

A partir de aquí, y de forma gradual, podrás ir introduciendo el resto de frutas. Hay que tener en cuenta que algunos alimentos como las fresas, los kiwis, los melocotones o las frutas tropicales hay que dejarlas para más adelante, ya que suelen catalogarse como alérgicas. 

¿Cómo saber si tu bebé es alérgico o intolerante a alguna fruta?

Para comprobar si tu peque tiene alguna alergia o intolerancia, es imprescindible ofrecerle papilla de una sola fruta durante 3 o 4 días seguidos, y ver cómo reacciona su organismo. Si no presenta ningún problema, podremos entonces preparar un nuevo puré con otra de las frutas recomendadas para su edad. El motivo de hacerlo así es porque si mezclas varias frutas en una sola receta, nunca sabrás cuál de ellas le ha provocado la reacción adversa.

¿Cómo preparar papilla de frutas?

Para empezar, lo más recomendable es seguir una de estas dos opciones:

  1. Pelar y cortar las piezas de fruta en trozos y pasarlas por la batidora. Opcional: añadir un chorro de zumo de naranja o mandarina natural. No olvides quitar las pepitas, huesos y granos que puedan contener las piezas.
  2. Pelar, cortar y cocer la fruta como si fuese una compota. Después, batirla y añadirle leche materna o de fórmula y/o espesarla con cereales. Si eliges probar esta opción, recuerda no cocer demasiado tiempo la fruta para que no pierda sus propiedades nutricionales.

El añadir leche templada en la papilla suele ser uno de los trucos que mejor funcionan en la mayoría de los casos. Esto es debido a que el bebé reconoce el sabor de un alimento familiar, y no se le hace tan extraño el probar y aceptar algo nuevo. 

Otro consejo es comprar frutas frescas y maduras, además de quitarles siempre la piel hasta que tu pequeño/a sea suficientemente capaz de morderla y digerirla correctamente. 

Otras formas de darle fruta a los más pequeños

¡La papilla de frutas es sólo el comienzo! Una vez comprobado que tu bebé tolera bien la fruta, podemos ir variando su presentación: sorbetes, macedonias, zumos de varias frutas, batidos, smoothies, dentro de yogures naturales, etc. ¡Imaginación al poder!

¿Cuánta fruta debe comer tu bebé según su edad?

Un bebé de unos 6 meses de edad debería comer, aproximadamente, unos 200-220 gramos de purés de fruta. Esto equivaldría a media manzana, media pera y medio plátano, además del zumo de naranja si decides optar por él. Desde Club familias aconsejamos ofrecérselos en plato y cuchara, en vez de biberón, para que vaya acostumbrándose a nuevas texturas y a comer con cubiertos. ¡Qué grande está ya, ¿verdad?!

Si pese a elegir las naranjas y mandarinas más dulces, sigue teniendo un toque ácido y tu bebé lo rechaza, prueba a añadir cereales (con o sin gluten) o algunas galletas sin azúcar, ¡verás cómo mejora el sabor!

En cualquier caso, lava siempre muy bien la fruta y córtala en trocitos pequeños para evitar que pueda atragantarse. 

Y, si prefieres que sea él/ella quien dirija su propia alimentación y experimente por sí solo con la comida, entonces el Baby led weaning puede ser una muy buena solución. 

Otras opciones de papilla de frutas

Aunque por su composición y valor nutricional no sean equiparables a un puré de frutas casero, otra vía para que los bebés empiecen a familiarizarse con el aroma y sabor de las frutas, y de alguna manera las acepten mejor, es introducir en su alimentación las papillas de cereales que contienen frutas

 

Algunas alternativas recomendables son Blevit plus Superfibra Frutas para los bebés que aún no se han iniciado en esta nueva dieta, y Blevit plus Duplo 8 Cereales y Frutas o Blevit plus duplo Multicereales con Frutos Secos, Miel y Frutas para los que ya van más avanzados en materia.