¿Cómo afecta el ruido al feto?

  • 3 de Abril del 2019
  • 3 min de lectura

El sentido del oído es uno de los primeros que desarrollan los fetos, pero ¿cómo afecta el ruido al feto?. Hacia la semana 24 ya son capaces de oír sonidos del exterior que le llegan a través del útero, por lo que conviene evitar ruidos por encima de los 85 Db para prevenir posibles riesgos en el desarrollo del feto.

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¿Cómo se puede estimular el oído del feto?

El órgano del oído es uno de los primeros en desarrollarse por completo. Comienza en la tercera semana de embarazo, hacia la semana 16 de gestación el feto ya puede oír los sonidos del interior del cuerpo de su madre y unas 8 semanas después ya puede procesar la información sonora externa que le llega a través del útero y es capaz de realizar movimientos dentro del vientre materno en base a los sonidos que le llegan del exterior.

  • Por eso, se recomienda a la madre hablar, cantar y ponerle música al bebé desde la semana 20 más o menos, ya que está comprobado que el sonido le llega y le ayuda en su desarrollo estimulando el sistema nervioso central.
  • Le llega, eso sí, ligeramente atenuado, porque la barrera física de la madre (piel, músculo, útero), combinada con el líquido amniótico en el que se mueve el pequeño hace que el sonido disminuya unos 30 decibelios.
  • A pesar de ello, diversos estudios realizados en animales han demostrado que existe una gran sensibilidad del oído interno ante los ruidos constantes y muy fuertes, aunque falta confirmar esos estudios en humanos.
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¿Afectan los ruidos fuertes al feto?

Parece claro que la exposición prolongada a ruidos por encima de los 85-90 decibelios puede provocar una pérdida auditiva en recién nacidos, y está relacionado con un aumento de las posibilidades de tener un parto prematuro o un retardo del crecimiento intrauterino.

Estos daños podrían aparecer si la madre tiene una jornada laboral de 8 horas seguidas en un espacio con grandes ruidos, como el tráfico, taladradoras, etc. Es decir, hay que evitar la exposición constante, pues puede provocar estrés e hipertensión en la gestante y condicionar el desarrollo fetal. No ocurre nada por estar un día en un lugar con mucho ruido o por pasear en una ciudad bulliciosa.

Por eso, si tienes un trabajo de riesgo en el que crees que se sobrepasan los 85 Db, pide a la empresa o al responsable medirlo con un aparato adecuado, ya que si se confirman tus sospechas, tienes derecho a pedir un cambio de puesto o la baja por riesgo para tu bebé.

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FAQs sobre cómo afecta el ruido al feto

Respondemos a las preguntas más habituales sobre este tema.

¿Qué pasa si hay mucho ruido en el embarazo?

Los niveles altos de ruido causan estrés que pueden producir cambios en el cuerpo de la gestante y afectar al desarrollo del feto. No se ha establecido que nivel de sonido es seguro para la futura madre y su hijo, los expertos se guían por el conocimiento de cómo viaja el sonido a través del cuerpo.

¿Cómo afectan los ruidos fuertes al feto?

Se ha comprobado que los ruidos fuertes y repentinos, al igual que asustan a la madre, pueden asustar al feto aumentando su actividad justo después del sonido, pudiendo cambiar el ritmo de los movimientos de su corazón o provocando que vacíe su vejiga. Tanto los movimientos como la taquicardia se vinculan a una situación de estrés y secreción de adrenalina que puede afectar al sistema nervioso central.

¿Cuánto ruido puede soportar un bebé?

Hay que evitar exponer al bebé a ruidos por encima de los 100 dB, especialmente de manera constante, para evitar dañar su sistema auditivo. En un adulto, los ruidos a partir de 85 dB perjudican la audición.

¿Cuántos decibeles escucha un bebé en el vientre?

El feto escucha con mayor intensidad los sonidos del interior del cuerpo de la madre (latidos, ruidos intestinales y la voz). Los ruidos del exterior están atenuados por el líquido amniótico y recibe los que se emiten entre 20 y 50 dB.

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