A la hora de preparar un puré de frutas o de descongelar uno de verdura, ¿cuántas veces te ha pasado ver cómo la fruta empieza a pardear si no la consumes de inmediato o que la textura de la verdura queda demasiado grumosa una vez se descongela?.
Para intentar ayudarte a que los purés de tu hijo mantengan al máximo su valor nutricional y sus características organolépticas (aroma, sabor, textura), aquí te indicamos algunos consejos prácticos que te serán de utilidad.
Para elaborar los purés de verduras córtalas a trocitos, cúbrelo todo con agua y hiérvelas sin sal y hasta que estén blanditas. Otra opción es que la cuezas al vapor. Seguidamente, para preparar el puré retira la parte del agua, pásalo todo por el pasapurés y en último momento añade una cucharadita de aceite de oliva.
Ten presente que si te sobra un poco de puré es recomendable que no lo guardes. Ofrece un nuevo puré en cada toma.
A continuación te mostramos unos consejos básicos para la correcta elaboración de los diferentes purés:
- Lava, pela y elimina las pepitas de la fruta, así como las partes negras y magulladas. No es recomendable añadir ni azúcar ni miel. Para evitar el pardeamiento, añade unas gotas de limón.
- Pela y lava la verdura.
- En el caso de la carne, elimina la grasa visible si la hay y escoge cortes tiernos y magros.
- Elige trozos de pescado sin espinas ni piel. Puedes usar pescado fresco o congelado. En el caso del pescado fresco, es recomendable que lo congeléis en casa para evitar alguna alergia por presencia de Anisakis.
Si lo deseas puedes congelar los purés, siempre y cuando sigas las siguientes pautas:
- Nunca congeles el puré cuando todavía esté caliente.
- Etiqueta el puré con la fecha y el tipo de puré. El tiempo durante el que debes conservar el alimento congelado debe ser el mínimo posible.
- Descongela en la nevera siempre.
- Nunca vuelvas a congelar un puré descongelado.
- Es recomendable congelar los purés con la verdura a trozos y una vez descongelado triturarlo todo. La textura te quedará mucho mejor.
- Congela los purés sin la adición de leche o lácteos como quesitos. Puedes añadirlos una vez descongelado.
- En el caso que congeles el puré de frutas, añádele la naranja después de descongelar, antes de dárselo al bebé, para que mantenga su contenido de vitamina C.
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