¿Son compatibles el café y la lactancia?

Es normal que, a la hora de amamantar al bebé, las mamás se pregunten qué pueden comer y qué no y si lo que comerán le afectará al bebé. Lo mejor es que sigan una dieta variada y equilibrada en nutrientes, evitando alimentos procesados o con escaso valor nutricional. Aunque hay que tener en cuenta que ciertas sustancias, como la cafeína, pasan a la leche materna, por lo que seguramente te preguntarás, ¿son compatibles el café y la lactancia? 

Intentaremos despejar todas las dudas. 

¿Son compatibles el café y la lactancia?

Si eres de las personas amantes del café y durante tu embarazo lo dejaste de consumir, seguramente te preguntes: ¿ahora que mi bebé ya nació, podré volver a beber café? 

El café es una de las bebidas más consumidas por la mayoría de las personas en el mundo; este es un gran estimulante del sistema nervioso central. La cafeína es el principal componente activo del café, una taza de café puede contener entre 60 y 200 mg de cafeína, dependiendo del café. 

Además de la cafeína, el café también presenta varios compuestos bioactivos con efecto antioxidante y antiinflamatorio, así como compuestos fenólicos como el ácido clorogénico.

Durante la lactancia hay muchos compuestos ingeridos por la mamá que pasan a la leche materna; la cafeína tanto del café como de otras bebidas (té, mate, refrescos, cacao…) es uno de ellos. Es por ello que siempre es aconsejable consultar con un profesional sobre el consumo de ciertos alimentos y/o bebidas si se nos presenta alguna duda. 

Según algunos estudios, ciertas dosis de cafeína son inofensivas para el bebé, por lo que el café y la lactancia pueden ser compatibles, siempre y cuando no se abuse de esta bebida.

¿Todo café es igual? ¿Cuánto café se puede tomar durante la lactancia?
 

No todo el café es igual, también está la opción del café descafeinado, este tipo de café al que se ha extraído gran parte de la cafeína, aún contiene los antioxidantes beneficiosos del café. Si estás pensando en pasarte a este café durante la lactancia, siempre es una buena opción que escojas los orgánicos; este tipo de café no contiene químicos ni pesticidas. 

Pero si aún así sigues escogiendo el café normal, siempre que sea en dosis bajas, puedes consumirlo. A la hora de mezclar café y lactancia, un consumo moderado, de dos a tres tazas elaboradas en casa, puede considerarse seguro. Las dosis diarias, seguras para el lactante, son entre 200 y hasta 300 mg de cafeína, si se consume más de esta cantidad pueden aparecer algunos síntomas en el bebé, como irritación por ejemplo. 

¿Qué efectos produce el consumo materno de cafeína en el bebé?

La cafeína ingerida por la madre, ya sea del café o de otras bebidas como infusiones o refrescos, pasa a la leche materna en ciertas cantidades. Una vez ingerida, la cafeína pasa rápidamente a la leche materna, produciendo un pico a la hora aproximadamente después de su ingestión. Y aunque solo entre un 2% a un 10% de la cafeína ingerida pasa a la leche, en los bebés recién nacidos y prematuros tiende a almacenarse por más tiempo y se metaboliza peor que en los bebés a partir de los 4 meses de edad, por lo que los síntomas pueden durar más tiempo.

Los síntomas que puede presentar el bebé, por un consumo excesivo de cafeína materno, son irritabilidad, insomnio y nerviosismo. Estos síntomas pueden variar de un bebé a otro, y es particular en cada caso. Sin embargo, si ves que tu bebé comienza a dormir peor o está más irritable desde que comenzaste a consumir café, te recomendamos que cambies el café con cafeína por descafeinado.

A pesar de esto, la Asociación Americana de Pediatría así como la Asociación Española de Pediatría, consideran seguro el consumo de cafeína durante la lactancia en cantidades inferiores a 300 mg al día.

¿Consumes café durante la lactancia? Cómo ya comentamos, la cafeína consumida por la madre aparece rápidamente en la leche materna, por ello es muy importante que el consumo de café en la lactancia sea con moderación.