¿Cómo puedo enseñarle a ser perseverante?

  • 19 de Octubre del 2016
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Cualidad de no rendirse y centrarse en su objetivo sobrepasando las dificultades que pueda encontrar en el camino, así puede definirse la perseverancia. Trabajar con tu hijo en ella le aportará una gran herramienta para su aprendizaje y futuro.

Los niños tienden a ser impulsivos y poco pacientes. Al principio les es difícil comprender que obtener resultados requiere de tiempo y trabajo para que sean visibles. Por eso, es importante trabajar con ellos su capacidad de mirar más allá y ser constantes y tenaces. De esta manera irán aprendiendo a desarrollar su perseverancia.

Una manera de ir poco a poco incentivando su tenacidad es felicitar su trabajo en lugar de sus resultados. Cuando consiga algún objetivo, alaba el proceso que le llevó a él. Esto le enseñará a centrarse en el trabajo y no perseguir simplemente los objetivos, lo que puede llevarle a buscar metas fáciles y cercanas en lugar de aspirar a otras más lejanas que requieran más trabajo y perseverancia.

Otro punto importante es hablar con tu hijo sobre los fallos y errores. Enséñale a adoptar una actitud positiva y constructiva ante los fallos que cometerá. Enséñale que el que no falla, no aprende, y que, más que frenos, deben ser aprendizajes e indicaciones sobre qué hacer y cómo mejorar para alcanzar el objetivo.

Y por último, intenta empezar siempre poco a poco. Anima a tu hijo a pensar en un objetivo que podría conseguir en un periodo corto de tiempo y enséñale a trabajar para lograrlo. Las pequeñas metas pueden ser el entrenamiento para que, en el futuro, se atreva a perseguir otras mayores.

Etapa vital