Masajes para calmar los cólicos de tu bebé

  • 15 de Enero del 2020
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Te hablaron mucho de ellos antes de que naciera tu pequeño y por fin están aquí; llegaron los famosos cólicos del lactante. Tu bebé llora durante horas y poco puedes hacer, además de armarte de paciencia, mantener la calma y ayudarle a expulsar los gases para que los cólicos no empeoren. Algo que también puede servirte es hacerle masajes específicos para calmar los cólicos del lactante. En este post te contamos cómo puedes hacérselos a tu bebé. 

Un llanto que no acaba

En los primeros meses de vida muchos bebés padecen los conocidos como cólicos del lactante. Se trata de unos dolores abdominales que les hacen llorar durante horas sin consuelo, angustiando, como es lógico, a la familia que se siente impotente al no poder calmar a su pequeño. 

No se conocen las causas exactas de este trastorno, pero los expertos creen que las principales pueden ser una inmadurez del sistema digestivo y la acumulación de gases

Tampoco hay tratamiento concreto, simplemente algunas indicaciones y pautas que pueden ayudar a calmar, o minimizar las molestias, como son las maniobras de masaje específicas para los cólicos. 

El masaje que le calma

El masaje infantil es muy beneficioso para los bebés, y, además, existen unas técnicas específicas que sirven para tratar los cólicos. A continuación, te detallamos algunas maniobras muy concretas que pueden ayudar a tu bebé a nivel físico y de acompañamiento emocional: 

  • Manos que reposan. Es el movimiento básico y consiste simplemente en dejar las manos relajadas, pero ejerciendo una leve presión, sobre el vientre del pequeño.  Esta sencilla maniobra también sirve para establecer un primer contacto con el pequeño y que empiece a relajarse. Si ha tenido recientemente cólicos, es posible que le cueste un poco, así que dale el tiempo que necesite hasta que se encuentre cómodo antes de pasar al siguiente movimiento. 
  • Haciendo círculos. Sin superar nunca la zona de las costillas, y en el sentido de las agujas del reloj, ya que es así como se mueve el contenido de los intestinos, empieza a mover las manos, primero una y luego otra, sin dejar nunca de tocar al bebé, realizando círculos sobre su abdomen y ejerciendo una ligera presión. 
  • Flexionando las piernas. Si el bebé está receptivo, prueba a flexionar ligeramente una de sus piernas y luego la otra llevando sus rodillas hacia el vientre. También puedes hacerlo con las dos piernas a la vez, manteniéndolas flexionadas unos segundos, y luego liberándolas. 
  • Abriendo un libro. Sitúa tus pulgares paralelos en el centro del abdomen del bebé, y, ejerciendo cierta presión, llévalos a los lados a la vez, como si abrieras un libro. 
  • ILU (I Love You). Siempre en la zona inferior a las costillas, escribe sobre su abdomen las siglas ILU empezando en el costado izquierdo. 
  • Despedida. Empezando por el lado derecho de su abdomen, haz un movimiento de tecleo y acaba en el lado opuesto. Coge sus piernas y llévalas a un lado y a otro despacio. Ahora ya puedes cogerle y abrazarle. 

Algunas recomendaciones más

Aquí te damos algunos consejos para que aplicar esta técnica sea más efectivo y agradable para tu bebé: 

  • Escoge el momento adecuado para el masaje. Es mejor no hacerle los masajes en plena crisis, pues quizá lo único que consigas es alterar más al bebé o que se encuentre más molesto. Intenta encontrar un momento en el que esté tranquilo y no tenga hambre ni sueño. 
  • Ambiente y comodidad. Además de escoger el momento adecuado, es importante también que sepas aprovechar la oportunidad si está tranquilo creando un ambiente idóneo para la relajación de tu bebé. Asegúrate de que la temperatura sea adecuada y de que no haya corrientes de aire. Una música relajante y un poco de aceite de almendras para suavizar y calentar tus manos harán que se adapte a estas sesiones mucho mejor. 
  • El porteo también ayuda. La posición vertical favorece la expulsión de gases, por lo que puede ayudar a reducir los molestos cólicos. Asegúrate de utilizar un sistema de porteo ergonómico que respete la espalda del bebé y reparta su peso de manera equilibrada. 

Esperamos que estas maniobras de masajes para calmar los cólicos de tu bebé te sean de mucha utilidad, y, además de notar una mejoría en sus molestias, podáis disfrutar de un momento de relajación que haga crecer un poco más el bonito vínculo que estáis creando. 

Referencias