La prueba del talón

Entre los que ya son madres o padres la prueba del talón es algo conocido, pero si todavía no has sido madre, puede que no sepas de qué se trata. A continuación, te explicamos en qué consiste esta prueba y por qué y cómo se hace a los recién nacidos. 

¿En qué consiste la prueba del talón en bebés?

Se trata de un análisis de sangre que actualmente se realiza a todos los recién nacidos para detectar enfermedades metabólicas congénitas con el objetivo de empezar cuanto antes el tratamiento y evitar posibles complicaciones. 

¿Qué enfermedades detecta?

Con la prueba del talón se busca algunas de las enfermedades metabólicas más comunes. Estas patologías se caracterizan por un mal funcionamiento de la química interna del organismo que puede derivar en problemas mayores como alteraciones en la actividad de ciertos órganos o trastornos en el desarrollo y el crecimiento del bebé. La mayoría de estas patologías son genéticas, es decir, que el bebé las puede heredar de los padres, aunque estos no las padezcan.

El listado de enfermedades a detectar con la prueba varía entre comunidades autónomas, pero estas son las más comunes: 

• Hipotiroidismo congénito.
• Fenilcetonuria. 
• Fibrosis quística del páncreas.
• Hiperplasia suprarrenal congénita. 
• Hemoglobinopatías congénitas. 
• Anemia de células falciformes.
• Galactosemia. 
• Errores congénitos del metabolismo de ácidos grasos.
• Errores congénitos del metabolismo de aminoácidos.
• Errores congénitos del metabolismo de ácidos orgánicos. 

¿Cómo se hace la prueba del talón?

Se realiza mediante una punción en el talón del recién nacido con una lanceta, un instrumento quirúrgico que consiste en una lámina de acero cortante por ambos lados y con una punta aguda, diseñado para realizar pequeñas incisiones. 

Antes de realizar la punción, se debe masajear la zona para que aumente el riego sanguíneo y desinfectarla con alcohol de 70º, evitando los productos iodados. 

Una vez realizada la incisión, se presiona ligeramente y se limpia la primera gota de sangre con una gasa estéril. A continuación, se deja que se forme una nueva gota grande de sangre para que caiga sobre el papel absorbente y se empape en la zona delimitada. 

Las muestras obtenidas deben ser enviadas al laboratorio lo antes posible para su análisis.  

¿Cuándo se hace?

Como norma general se recomienda realizar la extracción de sangre a partir de las 48 horas de vida del recién nacido, tras una ingesta de leche de 24 horas. Normalmente esta prueba se lleva a cabo justo antes de dar el alta hospitalaria a la madre y al bebé. 

¿Qué pasa si la prueba del talón sale positiva?

Que en un primer cribado el resultado sea positivo no implica necesariamente que el pequeño tenga alguna de las enfermedades anteriormente citadas. Lo primero que se hace tras un positivo es repetir la prueba, y si es necesario, complementarla con otros análisis de sangre. 

Si tras las nuevas pruebas el resultado se confirma, el equipo médico decidirá cómo proceder, pues la actuación y el tratamiento varía mucho según la enfermedad de la que se trate. 

El diagnóstico precoz de estas patologías puede mejorar la vida del bebé reduciendo la morbilidad, mortalidad y las posibles discapacidades asociadas a dichas enfermedades.

¿Duele?

Aunque a las madres les gustaría leer que no lo es, lo cierto es que esta prueba sí resulta dolorosa y molesta, pues se trata de una punción para extraer sangre. Para evitar el dolor no se emplean medidas farmacológicas. En algunos centros hospitalarios permiten que la madre amamante al pecho al pequeño durante la extracción y así aliviarle y calmarle. 

No es agradable saber que a tu pequeño de 2 días le va a realizar una pequeña incisión en el talón, pero los beneficios por este instante de dolor son muchos, pues el cribado neonatal, o prueba del talón, puede ser clave para la salud de tu bebé. 

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