Contracciones de Braxton Hicks: ¿Cómo son? ¿Son normales?

Si eres madre primeriza, es probable que no hayas oído hablar nunca de las contracciones de Braxton Hicks, pero no te preocupes, porque en este post vamos a explicarte al detalle todo lo que necesitas saber sobre ellas y cómo detectarlas para distinguirlas de las contracciones de parto. 

¿Qué son las contracciones de Braxton Hicks?

Son falsas contracciones, ensayos que el útero va realizando durante el tercer trimestre de embarazo, recreando contracciones similares a las que se producen en el momento en el que se inicia el parto y así ir preparándose. Para tu tranquilidad, debes saber que no indican peligro de parto prematuro. 

¿Cómo son? ¿Cuánto duran? 

Las contracciones de Braxton Hicks se notan especialmente al hacer algún movimiento o al permanecer de pie durante un tiempo prolongado. Son cortas y muy irregulares, no superan los 30 segundos. 

La percepción es de contracción del útero, un endurecimiento del vientre casi automático, incluso pudiendo cambiar de forma en algunas ocasiones. No son dolorosas, o como mucho pueden generar un leve dolor en la zona baja del vientre. 

¿En qué semana se producen las contracciones de Braxton Hicks?

Por lo general suelen aparecer a partir de la semana 20 de gestación, aunque algunas mujeres pueden llegar a notarlas un poco antes. Conforme van pasando las semanas, se van haciendo más frecuentes. 

Diferencias entre contracciones de Braxton Hicks y contracciones de parto

Para saber si lo que estás sintiendo es una contracción de Braxton Hicks o una de parto, debes fijarte en las siguientes claves: 

• La duración. Las de Braxton Hicks duran poco, entre 30 y 60 segundos, mientras que las de parto duran un minuto o más. 
• La intensidad. Las de Braxton Hicks no son dolorosas, como mucho algo molestas, pero soportables. Las contracciones de parto son mucho más dolorosas y la intensidad puede ir aumentando. 
• El ritmo. Las de Braxton Hicks son muy irregulares y no aparecen manteniendo un ritmo marcado. Por el contrario, las contracciones de parto sí se dan con un ritmo y con el paso del tiempo se van incrementando y se va acortando el tiempo que transcurre entre una y otra. 
• Cambios de postura. Si moverte o adoptar otra postura calma la contracción, entonces es de Braxton Hicks. Si la intensidad y la regularidad de las contracciones se mantienen incluso cambiando la postura o caminando, entonces probablemente son de parto. 

En nuestro blog también puedes saber más sobre los tipos de contracciones que hay.

Consejos para calmar las falsas contracciones

Aunque no son dolorosas, si son muy seguidas, estas contracciones pueden resultar algo molestias por la tensión que ejercen en el vientre. Aquí tienes algunas recomendaciones para llevarlas mejor: 

• Cambiar de postura, especialmente si llevabas un rato tumbada.
• Caminar, pues al andar la musculatura se relaja, también el útero. 
• Por el contrario, si las notas al estar mucho rato de pie o activa, siéntate un rato y descansa. 
• Un baño o una ducha relajante para destensar todo el cuerpo. 
• Realizar ejercicios de respiración y relajación mental. 
• Bebe agua o toma una infusión. Por si tienes dudas de las infusiones que se pueden tomar durante el embarazo, en este post te contamos cuáles están permitidas. 

Si las contracciones se intensifican y se van tornando regulares, y llegas a dudar de si son de Braxton Hicks o de parto, lo mejor es que acudas a un centro médico para que un médico te confirme de qué tipo de contracciones se trata.  

Esperamos que ahora que ya sabes qué son las contracciones de Braxton Hicks y cómo distinguirlas, estés más tranquila y segura cuando notes cómo se contrae tu útero. ¿Tienes más dudas sobre el embarazo? ¡Visita nuestra Guía del embarazo y despéjalas todas!