Todos los niños son muy activos, pero algunos lo son mucho más, por lo que educarles puede ser todo un reto para los padres. Te damos las claves para ayudarte en su día a día y poder tratar a los niños inquietos.
¿Cómo son los niños inquietos?
Los niños muy movidos tienen una serie de rasgos característicos:
- Son muy activos y se pasan el día corriendo, gritando, saltando…
- Tienen un temperamento muy fuerte y enseguida estallan en una rabieta o pataleta.
- Quieren ser siempre los primeros en todo.
- A veces presentan retrasos en el habla y el desarrollo.
- Suelen estar castigados casi todo el tiempo, tanto en casa como en el colegio.
- Se meten frecuentemente en peleas.
- Son impulsivos y sus prisas hacen que sufran accidentes con facilidad.
¿Cómo educar a los niños inquietos o hiperactivos?
Si bien cada niño es único y diferente, existen una serie de consejos recomendados:
- Primero que nada:nunca debes perder los nervios. Intenta entender que es la forma de ser de tu hijo, no lo hace para molestarte ni sacarte de quicio. Debes tener paciencia con él o ella.
- Nunca le etiquetes ni le digas a todas horas que es muy inquieto y que no para. Cuanto más se lo digas, más lo será.
- Explícale por qué no puede pasarse el día moviéndose y por qué hay ciertas situaciones, como en clase, que debe estar quieto y tranquilo.
- Una buena manera de canalizar su energía es realizando algún deporte y saliendo a la calle a jugar y correr al aire libre.
- Colorear o hacer manualidades suele gustar a los más pequeños y les ayuda a relajarse y permanecer quietos un rato.
- Enséñale técnicas de relajación para que aprenda a descargar los nervios y parar cuando esté “a tope”.
- Elógiale y prémiale de alguna manera cuando su comportamiento sea el adecuado.
Etapa vital
Referencias
- Carrobles, José Antonio; Pérez-Pareja, José (2008), Escuela de padres. Guía práctica para evitar problemas de conducta y mejorar el desarrollo infantil, Madrid, Ed, Pirámide.
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